domingo, 19 de mayo de 2013

E-Waste


Resumen del reportaje: “The Electronic Wasteland - 60 minutes - CBS”


Resumen del reportaje:

 “The Electronic Wasteland - 60 minutes - CBS” 

No basta esperar seis meses para ver el último modelo de celular con lo “último” en Tecnología o ver la nueva laptop de alguna marca, seis meses es lo que tarda hoy en día que un aparato electrónico se vuelva desactualizado con respecto a lo último en el mercado. Y así es como esta sociedad consumista que somos adquiere cada vez más y más aparatos electrónicos para satisfacer ese deseo de querer lo más nuevo, pero, ¿qué pasa con lo viejo?, es aquí donde esté reportaje nos muestra la triste y cruda realidad que se vive en cuanto al manejo de Desechos Electrónicos.

Scott Pelley, el presentador del programa 60 minutes de CBS, nos introduce en esta problemática que para este reportaje sucede en un pueblo en China, pero al fin y al cabo está sucediendo en muchos lugares del mundo donde es más “barato” tirar los desperdicios electrónicos o e-waste.

Este pueblo en China es considerado de los más tóxicos en el mundo, en un pueblo que está tan contaminado que no se puede respirar sin haber inhalado enormes cantidades de tóxicos y lo mismo sucede con el agua. En este pueblo viven muchas familias y personas dedicadas al desmantelamiento de  desperdicios electrónicos, este desmantelamiento es realizado sin ninguna medida específica de seguridad, ambiental, técnica o de ningún tipo, es realizado con el objetivo de obtener diferentes materiales tales como LED, Cadmio, Plomo, Mercurio, Cromo, los cuales son sustraídos para ser reutilizados, hasta aquí la actividad no parece ser mala pero el problema es la forma como lo hacen, como se ve en este reportaje estas personas ponen al fuego todos estos componentes los cuales generan una cantidad considerable de gases tóxicos los cuales se respiran en todo alrededor del lugar de desmantelamiento.

En este pueblo de China que tiene por nombre Weiju, tiene por paisaje enormes montañas de desechos electrónicos, los cuales son vistos desde el aire y la cantidad de estos aparatos abarcan miles de metros cuadrados de basura electrónica.

También el reportaje nos muestra como desde el otro lado del mundo, específicamente en Estados Unidos, se hace una campaña para recolección de los desechos electrónicos y decenas de personas hacen filas por horas para dejar sus inutilizados aparatos, se ven computadoras, impresoras, teclados, pantallas, entre otras cosas. Sólo en Estados Unidos se desechan más de 130 000 computadoras por día y más de 100 000 000 teléfonos celulares por año, algunos de ellos son dejados por personas en estos centros de recolección con la promesa de ser procesados bajo medidas de seguridad y ambientales necesarias para que no contamine o dañe de alguna manera el planeta. Como se menciona al principio del programa, la búsqueda por reducir la huella ecológica o ser un consumidor “verde” puede ser un arma de doble filo, ya que al final no se sabe con exactitud dónde van a quedar todos estos desechos y no sólo eso, sino también como van a ser procesados.

En el reportaje muestran como estos centros de recolección, después de haber recolectado los desechos electrónicos durante campañas de reciclaje, envían de manera clandestina contenedores a China. El programa hace un seguimiento del contenedor que sale del centro de recolección en Denver y localizan dicho contenedor en Hong Kong, China. De ahí este contenedor es enviado al pueblo que se menciona al principio. Todo este proceso es ilegal ya que para enviar un contenedor desde China es necesario contar con permisos especiales.

Con la ayuda de un guía que ya ha investigado la zona y este tema, llegan a Weiju para lograr capturar imágenes de los basureros de desechos electrónicos; el periodista compara a Weiju con Chernóbil, por la cantidad de tóxicos que se encuentran en ambos lugares, en el primero por este problema de e-waste y el segundo por el accidente nuclear.

Mientras se encuentran en el lugar se topan con autoridades que los limitan en su trabajo de investigación y son enviados a la oficina del Alcalde, el cual por solicitud de ellos son guiados a un centro de recolección dentro de la ciudad, el cual no se compara con los otros lugares de desechos descubiertos anteriormente desde el aire y que existen en otras partes de la ciudad. El mismo alcalde les explica que ellos no son bienvenidos en el lugar y que nada más les enseñará ese lugar, ya que el pueblo no está preparado para recibirlos y los despachan con escolta policial. Aquí se nota como incluso los mismas autoridades de la zona están conscientes de la problemática y de la ilegalidad de estos lugares, se nota como un pueblo consumido en la pobreza extrema con autoridades que gozan de lujos, están prácticamente obligados y expuestos a estas actividades, ya que no hay muchas formas de ganarse la vida y como las oportunidades son pocas es preferible exponerse a estas peligrosas sustancias y actividades a no tener dinero para sobrevivir.

Muestran imágenes tomadas por Greenpeace donde en estas zonas de reciclaje ven como las mujeres se dedican a sacar los chips y algunos componentes, los hombres usan químicos peligrosos para sustraer el oro y ven miles y miles de desechos electrónicos amontonados sin ningún tipo de tratamiento. También hay una entrevista donde hay algunos trabajadores de estos lugares donde comentan como afecta estas actividades su salud, por ejemplo a la hora de respirar, ellos mencionan que a pesar de haberse cuestionado dejar de hacerlo también que están ahí porque ganan buen dinero.

Weiju está tan contaminado por esta actividad que se encontró que es la ciudad más tóxica en el mundo y por lo cual se produce cáncer, se encontró que 7 de cada 10 niños tienen demasiado LED en su sangre, así como embarazos complicados por dicha situación.

Aún sin tener la noticia que buscaban, el equipo de investigación, emprende de nuevo otro viaje al pueblo y  a la zona de desmantelamiento de estos desechos, para ello cambian el carro y escogen otra ruta.

El equipo llega al lugar se nota una nube de las quemas que realizan para sustraer diferentes elementos, y hasta observan un río de cenizas de dichas quemas, donde los niños juegan y se ven expuestos a todas estas sustancias que alteran su salud irremediablemente. Pocos minutos después los encargados del lugar emprenden violencia contra el equipo para echarlos y trataron de quitarles las cámaras, ellos mismos no querían ser filmados ya que tiene miedo de ser encontrados, porque esas actividades son ilegales. Actividades que se realizan por el hecho de la oferta que produce Estados Unidos y otros países ricos, enviando todo este material a países más pobres.

De vuelta en el centro de reciclaje en Denver se le muestra evidencia de estas actividades y de la exportación de material de desecho electrónico a China, al encargado de este centro, él no acepta dichas evidencias, evadiendo la responsabilidad.

Es lamentable al darse de cuenta de situaciones como ésta ya que mientras en ciertos sectores se trata de reducir la afectación que se hace al ambiente en cuanto a estos residuos, del otro existen empresas y personas dispuestas a aprovecharse de la corrupción en las esferas políticas y la necesidad de las personas en condiciones paupérrimas, para lograr sus intereses económicos y no asumir una responsabilidad social-ambiental ante sus acciones.
 
                                                                                                                  Adolfo Gómez Bloise